En la sesión de ayer, el máximo órgano de gobierno universitario se pronunció en favor de la modificación del Código Civil que permitiría el matrimonio de personas del mismo sexo. A pesar de la opinión en contrario de Isabel Sanz, Decana de la Facultad de Química, Bioquímia y Farmacia, de emitir un dictamen sin haber realizado un debate más amplio que involucre a toda la comunidad universitaria y la consulta a especialistas, se emitió un pronuciamiento donde manifiesta estar "a favor de la modificación del Código Civil o cualquier decisión en el sentido de garantizar el mayor cumplimiento de los Derechos Humanos". No estuvo en la sesión el Rector Jose Riccardo y la Vice Rectora, si bien se pronuncio a favor de la medida, votó en contra de emitir un pronunciamiento ayer, en línea con lo que expresaba Sanz.
En otras oportunidades, en contra de lo que expresó la decana, y con su voto afirmativo, el Consejo Superior había tomado posición en torno a distintos temas que no solo hacen estrictamente al gobierno universitario y también emitió un dictamen sin una ronda de consultas. En la sesión se tomó más bien como una maniobra dilatoria para que no hubiese un pronunciamiento.
El documento redactado ayer:
En momentos en que la sociedad está debatiendo la modificación del Código Civil con el objetivo de permitir contraer matrimonio a personas del mismo sexo, el Consejo Superior de la Universidad Nacional de San Luis desea pronunciarse en el marco de lo que prescribe su Estatuto Universitario en su Artículo 153: “La Universidad garantiza el derecho de pensamiento y de opinión de todos sus miembros (…). Se rechaza toda forma de discriminación racial, sexual, generacional o religiosa.
Transformar una norma que genera diferencias en las vinculaciones legales entre personas exige un análisis desde el marco de los Derechos Humanos consagrados para todos los individuos por igual.
El reconocimiento de la diversidad es propio de un paradigma social contemporáneo, que supera caracterizaciones clínicas y psicopatológicas de lo considerado diferente, aspirando a una sociedad inclusiva. Todas las personas merecen el respeto, la igualdad y el reconocimiento de su dignidad por el resto de la sociedad sin discriminación. Este es el verdadero sentido de un Estado de Derecho que aspira a un crecimiento colectivo y al mayor alcance posible de las garantías individuales.
El Consejo Superior reconoce y respeta profundamente la multiplicidad de opiniones sobre este tema, que han sido hechas llegar al seno de este Cuerpo en relación a que el matrimonio solo puede ser concebido entre personas de diferente sexo, así como la que sostiene que ampliar la posibilidad del matrimonio a las personas del mismo sexo iguala oportunidades y posibilidades, en la medida en que se trata de una institución civil no religiosa.
Sin perjuicio de las diferentes opiniones, la tolerancia y el respeto de las distintas orientaciones sexuales de los individuos exige, además, no aceptar argumentos que ahonden en las diferencias, provoquen miedos, o aumenten prejuicios. Los estereotipos degradantes hacia aquellos que no cumplen con las construcciones sociales de género mayoritariamente aceptadas promueven valoraciones diferenciales en las personas. Si el sistema jurídico se suma a este modelo, profundiza y legitima la discriminación y rompe con principios constitucionales básicos que se consideran ampliamente definidos para todos “sin distinción de raza, color, sexo, idioma, religión, opinión política o de cualquier otra índole, origen nacional o social, posición económica, nacimiento o cualquier otra condición”, como lo prescribió la Declaración Universal de Derechos Humanos, (1948) y lo reafirma la Declaración de la Asamblea General de las Naciones Unidas, de diciembre de 2008.
Por todo lo antedicho, el Consejo Superior de la Universidad Nacional de San Luis se manifiesta a favor de la modificación del Código Civil o cualquier decisión en el sentido de garantizar el mayor cumplimiento de los Derechos Humanos.
Además, de acuerdo con lo establecido en el Artículo 1, Inciso c) del Estatuto Universitario: “Difundir el conocimiento y todo tipo de cultura, y participar activamente en la comunidad propendiendo a la formación de una opinión pública esclarecida y comprometida con el sistema de vida republicano y democrático.”, el Consejo Superior convoca a la Comunidad Universitaria y a la comunidad en general a profundizar el debate sobre el tema planteado organizando foros de discusión con la participación de especialistas y personas interesadas en el tema.
La sesión y los votos
No estuvo en la sesión el Rector Jose Riccardo y la Vice Rectora, Nelly Mainero, si bien se pronuncio a favor de la medida, votó en contra de emitir un pronunciamiento ayer, en línea con lo que expresaba Sanz.
La propuesta de la Decana de QByF estaba apoyada en una nota que iba acompañada por firmas de personas que no querían que hubiese un pronunciamiento del Superior y Sanz cuestionó la potestad del Consejo para pronunciarse en una sesión con quórum ajustado. Insistió en un debate más amplio. El planteo leído, tenía aspectos que parecían estar mas relacionados con temas de índole religiosa que con la modificación del Código Civil.
La Vice Rectora, Nelly Mainero, opinó que el documento que se emitiera tenía que mantener una posición equidistante, y no mostrarse ni a favor ni en contra de la iniciativa, sino más bien informar que el tema había sido debatido en el seno del órgano colegiado. A pesar que dijo estar a favor de la iniciativa que está en el Congreso, votó en contra del comunicado que se redactó ayer.
Los votos
En contra Nelly Mainero, Isabel Sanz, Silvia Menéndez y Cristina Velazquez; las dos últimas consejeras, representantes de los no docentes.
Votaron a favor del pronunciamiento la decana de la Facultad de Cs. Humanas, Marta María Pereyra González, la vice decana de la FICES, también Susana Rezzano, del claustro docente, Roxana Vuanello, Eduardo Borkowski, y Masine (Fices). También las representantes de los alumnos, Albertina Massana y Soledad Neiro.
FUENTE: PERIODISTAS EN LA RED